FASE 6. Definir el plan de evaluación

¿Qué pasos debemos completar?

PASO 1: Seleccionar el tipo de la evaluación

Evaluar una intervención es hacer un estudio de la misma. Este estudio o análisis se puede hacer de los varios componentes de la intervención, lo cual da lugar a diferentes tipos de evaluación. Sin embargo, Paso@Paso pretende facilitar el acceso a las prácticas de evaluación de modo que, en vez de abarcar todas las diferentes formas posibles de evaluar una intervención, se centra en dos de ellas: la evaluación de proceso y la evaluación de resultados. Ambas son necesarias para poder hacer evaluaciones más complejas, como la de impacto o la económica. La evaluación de proceso y la evaluación de resultados aportan información complementaria y, aunque a veces suelen confundirse, sus propósitos son distintos y utilizan información diferente. Una primera diferencia entre ambas se puede ilustrar a través de la siguiente tabla:

Mientras que la evaluación de resultados se centra en comprobar la consecución de los objetivos generales y de los objetivos específicos, la evaluación de proceso se centra en analizar cómo se ha ejecutado la intervención y, por tanto, se basa en el plan de actuación.

Así pues, la evaluación guarda conexión lógica con las tareas iniciales del proceso de planificación de una intervención. Por tanto, no existe un tipo de evaluación mejor que otra, sino que la más apropiada en cada caso es aquella que se define de acuerdo a los objetivos, el plan de actuación y los recursos disponibles.

Una tarea clave en toda evaluación consiste en seleccionar los indicadores adecuados que habrán de permitir analizar la intervención. En el paso 2 de esta fase se informa sobre este aspecto.

• Evaluación de proceso. +
• Evaluación de resultados. +

En los siguientes enlaces encontrará información adicional sobre evaluación: Ver