FASE 5. Definir el plan de actuación

¿Qué pasos debemos completar?

Paso 1: Concretar las acciones de la intervención

INTERVENCIONES EDUCATIVAS (ESCOLARES) SOBRE HABILIDADES SOCIALES Y PERSONALES E INFLUENCIA SOCIAL*

Los programas escolares basados en entrenar habilidades de vida en la (pre)adolescencia emplean métodos interactivos para facilitar el aprendizaje de diferentes habilidades sociales y personales, incluyendo las relativas a hacer frente a las presiones sociales para consumir drogas; analizar críticamente las normas sociales, las actitudes y las expectativas sobre el uso de sustancias; y corregir las creencias normativas erróneas (a menudo sobreestimadas) acerca de la prevalencia del uso de drogas entre el grupo de iguales.

Estudios realizados en EUA, Europa y Australia y también -aunque con resultados más variables- en África, América Latina y Asia, indican que algunos programas escolares pueden prevenir el abuso de todo tipo de sustancias, incluso a largo plazo, extendiéndose sus efectos positivos a la reducción del abandono escolar y otros problemas. Los programas que logran estos resultados tienen en común el hecho de emplear métodos interactivos para trabajar habilidades sociales y personales y analizar las influencias sociales relacionadas con el consumo de drogas (normas sociales, expectativas, creencias normativas).

Estas intervenciones parecen ser más efectivas cuando se aplican en la preadolescencia o el inicio de la adolescencia que cuando se aplican a alumnos más mayores.

Habitualmente, su aplicación va a cargo de profesionales entrenados para ello (generalmente el profesorado), aunque hay experiencias de aplicación por medios telemáticos con buenos resultados. Por otro lado, aunque en general estas intervenciones se emplean como estrategia de prevención universal, también obtienen resultados positivos cuando se aplican a grupos de riesgo.

Las características que se asocian con el buen o el mal funcionamiento (falta de efectos o efectos negativos) de estas intervenciones son:

BUEN FUNCIONAMIENTO

MAL FUNCIONAMIENTO

Hacer uso de métodos interactivos. Trabajar un rango amplio de habilidades, incluyendo las de toma de decisiones y de resistencia a la presión social para usar drogas. Incluir varias sesiones (10 a 15 generalmente) estructuradas y aplicadas semanalmente. Incluir sesiones de refuerzo en años posteriores. Ser aplicadas por personal entrenado al efecto (profesionales o incluso, compañeros). Sensibilizar sobre los riesgos y consecuencias asociados al uso de drogas, destacando los más inmediatos. Corregir las creencias normativas erróneas sobre el uso de drogas y las falsas expectativas relacionadas con su consumo.

Utilizar métodos pasivos de aprendizaje, como clases magistrales, charlas, conferencias… Limitarse a proporcionar información sobre las drogas. Recurrir al miedo para alertar sobre los riesgos de usar drogas. Emplear formatos de discusión no estructurados. Centrarse en trabajar la autoestima y/o la educación emocional. Abordar la toma de decisiones sólo desde la ética o la moral. Utilizar ex usuarios de drogas como testimonios. Utilizar a agentes de policía para implementar el programa.

 

* Basado en: International Standards on Drug Use Prevention (UNODC).